De oscuridad y otros aliados...

La oscuridad es embustera, por eso corro y prendo una vela, para escribir y ver mis letras.

La oscuridad me acorrala, puntual antes de dormir.

La oscuridad sólo acelera mis pensamientos rumbo a ti.

Me hace soñarte estando despierta. O no sé, porque no sé distinguir cuando mis ojos están cerrados o abiertos.

La oscuridad me hace sentir sola el peso de mis sábanas y desearte aquí.

Me gusta la oscuridad para pensarte, para desearte, para soñarte, para recordarte.

Me voy, me vengo y me pierdo entre recuerdos viajeros, entre sueños forasteros, entre deseos venideros.

La noche me gusta para ti… y el día, y la tarde y la madrugada y también el medio día.

Eres mi droga más sana, la más adictiva, la más arraigada. Eres la dosis exacta.

¡Te quiero mío hasta los huesos, que soy tuya hasta los sesos!

Eres como el candelabro de mis velas, como el sol atrapado en mi cabecera.

Te quiero como si fueras una estrella.

Eres el faro en el puerto donde quiero anclar, el coral delicioso que hizo encallar mis pasiones y la tabla a la que me aferro después de naufragar.

Te extraño como se extraña a la tierra desterrada, donde duermen los muertos de uno y viven los vivos suyos.

Dime a qué juegas cuando sueñas, si es que te permites soñar.

Me siento sacrílega de recordar como te recuerdo. Me siento fuerte, determinante y abnegada.

Me recuerdo a mí como a una naranja, partida por la mitad, cítrica, fresca y mojada.

Eres la pasión más completa, a la que soy más devota, más entregada. Eres el común acuerdo de mis instintos. La gota más fresca y la flama más tibia.

La oscuridad me pone en evidencia y de cara con mis daímons. De todos ellos, eres el que más me gusta, al que más disfruto, al que mejor venero.

Al que acaricio a todas horas con letras, manos o pensamiento.

Por el que espero la oscuridad para describirte escribiendo en silencio.

ESCUXESE: All my love, Led Zeppelin

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agradecimiento especial a Jude, como aliada!